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Nubes y claros en la selección española

La selección española llega al Mundial de Qatar con un panorama repleto de dudas y certezas

La selección española llega al Mundial de Qatar con un panorama repleto de dudas y certezas.

El pasado jueves se disputó el Jordania – España previo a la gran cita mundialista, la última prueba de los de Luis Enrique de cara al torneo. Un partido difícil de medir por el contexto en el que se desarrolló: contra una selección de un nivel inferior, con muchas rotaciones y en un terreno de juego peor a los que se encontrarán en tierras cataríes. Teniendo en cuenta todo esto, el desarrollo de la selección con el técnico asturiano y los resultados que acarrea en los últimos torneos queda un panorama desconcertante. Uno repleto de nubes y claros.

Las dudas comienzan en la lista de 26 jugadores que ha dado el seleccionador. Sin embargo, más allá de los que se han quedado fuera o dentro de este selecto grupo, el principal problema de España es que tiene una notable falta de talento. Por posición hay pocas certezas, mucho nivel medio y, entre todos ellos, cada cual prefiere llevarse uno u otro. No obstante, los elegidos son los que son y se deberá juzgar su llamada al finalizar el torneo.

En el encuentro amistoso contra Jordania volvieron a surgir dudas en el apartado defensivo. Sin que la selección rival tuviera un gran ataque, consiguió anotar un gol y en los duelos directos con los centrales se les vieron las costuras. Unai Simón y Aymeric Laporte son piezas capitales atrás, aunque uno ayer no jugase en portería y el otro lo hiciera de lateral. En la pasada Eurocopa se erigieron como líderes en defensa y, año y medio después, apuntan a seguir con el puesto. Son las dos certezas que tiene Luis Enrique en su plan y, a partir de ahí, las posibilidades son múltiples.

La primera incógnita es el acompañante en la zaga del central del Manchester City. La posibilidad más natural es jugar con un central diestro de formación, como lo son Eric García y Hugo Guillamón, aunque este último esté desarrollándose en el Valencia como mediocentro. Otra de las opciones pasa por cambiar de perfil a Aymeric Laporte e introducir al otro central zurdo de la lista, Pau Torres. Ambas se vieron en el europeo y ninguna consiguió dar un salto competitivo. Es por ello que existen alternativas con jugadores fuera de posición. Entre ellas Luis Enrique tiene la baza de Rodri, que ayer tuvo minutos ahí, o la de César Azpilicueta, que ha desarrollado parte de su carrera como central en línea de 3. Aunque estas parecen más un parche para un escenario concreto que el argumento principal de la selección.

En cuanto a los laterales persisten las dudas pero las opciones son reducidas. En el perfil derecho aparece nuevamente el nombre de César Azpilicueta junto al de Dani Carvajal. Ambos son buenos competidores, tienen experiencia en grandes torneos y cualquiera puede asentarse en esa posición. Sin ser parecidos en la forma, en el fondo tienen ciertas similitudes. Mientras que en la banda izquierda España ha sufrido un relevo de última hora. José Luis Gayà ha sufrido un esguince de tobillo y lo suplirá Alejandro Balde. Es por ello que Jordi Alba apunta a la titularidad, pero el canterano culé puede contar con minutos allí.

En el centro del campo se esperan pocas sorpresas. Sergio Busquets y Pedri han sido dos de los jugadores más destacados en la era Luis Enrique. El canario es el futbolista español más en forma y está llamado a ser el eje central de la selección española durante los próximos años. En cambio, el capitán culé está en una etapa valle de su carrera, pero siempre ha contado con la confianza del seleccionador. Además, en la Eurocopa pasada fue su introducción como mediocentro lo que dotó de equilibrio al sistema español. Aún así, Rodri cuenta con opciones para arrebatar el puesto a Busquets, aunque no parece probable.

La única duda que surge es quien los acompañará. Opciones hay varias y con perfiles muy distintos: Gavi, Koke, Carlos Soler o Marcos Llorente. A priori, apunta a ser un duelo entre los dos primeros, mientras que los últimos pueden aportar un perfil distinto en minutos finales. No obstante, cualquiera de las variantes es una posibilidad competitiva para la selección.

A pesar de lo visto contra Jordania, España también tiene carencias en el apartado ofensivo. Es la zona donde más posibilidades de forma cualitativa y cuantitativa tiene el seleccionador asturiano. Su única pieza fija es Álvaro Morata como delantero centro, algo que dejó claro en la Eurocopa con su famoso “Morata y 10 más” y que reafirma llevándole como único nueve puro. A partir de ahí, hay muchas variantes.

El caso de Ansu Fati es el que más está en el aire. Por condiciones debería ser un jugador sobre el que vertebrar los ataques españoles. Es el futbolista que puede acercar a España al triunfo, con su talento con pelota y la capacidad para generar goles que atesora. El único problema es su salud. Apareció en la élite con puño de hierro, pero se apagó por una lesión de la cual aún se está recuperando. El atacante está retomando sensaciones y en el amistoso contra Jordania disputó más de 70 minutos en los que anotó un tanto, pero su papel dependerá de cómo se encuentre. Si está bien, debe ser importante.

A partir de estos casos, hay otras variables. Yéremy Pino y Nico Williams apuntan a ser futbolistas determinantes saliendo desde el banquillo. Dos futbolistas distintos al resto, regateadores, que pueden desequilibrar e influir en la forma de defender del rival. Han tenido buenas apariciones en la selección, sobre todo el extremo del Athletic Club, pero que pueden aparecer más como recurso que como plan principal.

Con todo esto, quedan las opciones de Dani Olmo, Ferrán Torres, Pablo Sarabia y Marco Asensio. Todos ellos, salvo el último, estuvieron presentes en el anterior europeo. Además, mostrando un gran nivel moviéndose por distintas zonas en ataque. Si Ansu Fati está sano y se asienta como titular en la banda izquierda, es Dani Olmo el que tiene menos posibilidades de partir de inicio porque ese es su perfil ideal. El resto se pueden desenvolver mejor por el otro costado y cada uno suma cosas distintas al colectivo. Sin llegar a ser una gran arma ofensiva, son perfiles que pueden sumar en un ataque carente de un líder goleador.

Sin duda, la mayor certeza que atesora esta selección está en el banquillo. Luis Enrique y su equipo han dotado a España de una identidad propia y han logrado lo más difícil, acompañarlo de resultados. A la Eurocopa llegaba con un ambiente similar al que se percibe ahora y fue semifinalista, derrotada en penaltis por Italia, que acabó levantando el título. Además, en la Nations League pasada fueron finalistas, perdiendo frente a Francia, y está clasificada para la final four del mismo torneo que viviremos el próximo verano. A falta de talento diferencial, han apostado por su idea, han creado un grupo en el que reman todos juntos y esa es la principal baza que maneja la selección española.

Mañana se dará el pistoletazo de salida al Mundial con la ceremonia inaugural y el posterior Qatar – Ecuador. España hará lo propio el miércoles contra Costa Rica, y luego llegarán los enfrentamientos contra Alemania y Japón. Estas son las primeras pruebas de una selección que llega a la cita con un mar de dudas, pero que tiene una idea clara. Y eso, muchas veces, es lo más importante en este deporte. Así que lo justo será valorar a este grupo después del Mundial.

 

Imagen principal vía: Mundo Deportivo

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