La Guardia Civil entraba por sorpresa en las oficinas de la RFEF tras un auto del magistrado Joaquín Aguirre en el que se imputa delito de cohecho.
«Estamos en el año 2023 despues de Jesucristo. Toda la Peninsula está ocupada por los corruptos… ¿Toda? ¡No! Un juzgado de Instrucción de Barcelona poblado por irreductibles jueces resiste, todavía y como siempre, al invasor. Y la vida no es fácil para las guarniciones de legionarios de la Justicia en los reducidos campamentos de juzgadum.
Nos situamos en una plácida mañana de septiembre. Día 28, para ser exactos. Todo transcurría con normalidad hasta que la Unidad de Policia Judicial de la Zona de Cataluña de la Guardia Civil hacía una irrupción sorpresa en Las Rozas (Madrid) para entrar en las diligencias la de Real Federación Española de Fútbol. Una deshonra para el fútbol español a nivel internacional. Al menos, creemos querer, que no hay pico de por medio. Solo picoletos.
Con qué propósito osan mancillar la buena imagen de España, os preguntareis. Bien, están buscando las actas de las reuniones del CTA en la que se puntuaron las actuaciones de colegiados de Primera y Segunda División. Casualmente, Negreira sabía que, con su famoso índice corrector, podría tergivérsalas según su criterio y sin ninguna oposición. Además, hablamos de que, en esos documentos, se detalla sobre partidos transcendentes, sobre ascensos y descensos de árbitros, así como los elegidos para encuentros internacionales.
Por curiosidad, veamos cómo se suministra el dinero a día de hoy.
- Un árbitro en Primera División gana 12.500 euros mensuales fijos más 4.200 euros por partido.
- Un árbitro de Segunda gana 6000 euros al mes fijos más 1.8000 euros por partido dirigido.
- Un árbitro designado como internacional, gana en un partido de Champions League, entre 8.000 y 10.000 dólares.
De momento, no tenemos transferencias con IBAN y nombre de parte de Negreira, pero sí sabemos que una decisión suya implicaba cierta cantidad de dinero a la que creo, honestamente, que ninguno de nuestros lectores rechazaría sin pestañear.
Igualmente, el tema económico está sin aclarar. Unos malvados romanos pagaron 7.5 Millones de euros a Negreira, entonces vicepresidente del Comité Técnico de Árbitros desde el año 2000 hasta el 2018. Casualmente, el año que dejaba de ejercer como Vicepresidente del CTA. Bueno, esto lo que sabemos de forma oficial.
Bien, pues no os creáis que se sabe dónde está ese dinero. El señor Negreira tiene bienes embargados, una cuenta más vacía que la de un estudiante y un hijo que clama al cielo por tal caza de brujas.
Lo único que sabemos es que hay un informe judicial que analiza el patrimonio de los árbitros. En él, se detalla cómo árbitros como Clos Gómez tienen un exacerbado patrimonio inmobiliario al que accedieron pagando al contado, sin hipoteca mediante. Pongo este colegiado como ejemplo porque destaca, entre otras cosas, por ser un árbitro con el que F.C Barcelona jamás perdió. Cuentan con un 84% de victorias en, nada más y nada menos, que 24 encuentros. Mientras tanto, el Real Madrid solo cuenta con un 62% de encuentros ganados bajo la atenta mirada del aragonés.
Por si fuese poco, este agradable sujeto es el jefe del VAR. Tranquilo, no hace falta que usted se restriegue los ojos, ya lo he hecho yo por todos. No es único colegiado que debe dar explicaciones. Hay más casos pero vayamos al turrón.
El magistrado Joaquín Aguirre ha dado un golpe de timón en el proceso judicial. Entiendan que no es nada fácil imputar a un club por corrupción deportiva ya que las evidencia deben ser más que claras. Sin embargo, ha hecho uso de una Sentencia del Tribunal Europeo que es de obligado cumplimiento en territorio nacional, en la que se considera a los dirigentes de la Real Federación Española de Fútbol cómo FUNCIONARIOS A EFECTOS LEGALES. Esa Sentencia a la que se refiere se hizo realidad con los casos de corrupción del futbol italiano.
Este golpe sobre la mesa es realmente clave ya que entiende que, pese a que una federación es un empresa privada, es de interés público para la nación y, por tanto, sus dirigentes deben ser juzgados como funcionarios a ojos de la ley, por tanto, se les imputa un delito de cohecho,
Brevemente, es intentar sobornar a un funcionario público con el objetivo de tener una actuación favorable. Muy resumido pero explícito.
Sí están leyendo este artículo con la pasión de un ultra, quizás no han hecho hincapié en que he escrito “intentar sobornar”.
Efectivamente, el juez aclara en su auto judicial que el simple de hecho de existir el pago, es delito. Aspecto muy clave para entender por qué derroteros irá la sentencia judicial. Por tanto, los grandes implicados serían el FC Barcelona, D. Sandro Rosell, D. Josep Maria Bartomeu y a Negreira, padre e hijo, entre otros. Pronto los veremos sentados en el banquillo y no precisamente siendo defendidos por Ronald Araujo o Christensen. Aclaremos que esos pagos no son acusaciones, son pruebas incriminatorias.
Entonces, qué penas pueden caerle a este selecto grupo de actores del fútbol español. Veamos, tenemos entre 3 y 6 años de cárcel, cierre de instalaciones… hasta una pena máxima que sería la de disolución de la entidad. Quizás, la pena más amenazante es la del cierre de actividad, la cual implicaría el descenso administrativo. Se considera tan amenazante porque es más proclive que suceda antes que una disolución.
Queridos lectores, casi se olvidan de que aquí, hay una institución que bien puede entrar de oficio y que, además, se reserva todo el derecho a hacerlo. La Federación Internacional de Fútbol Asociación (FIFA). Esta entidad sabe que engloba a países cuyas justicias son un tanto curiosas, entre otras, podemos incluir la española con esa criticada ley del deporte. Por lo tanto, pueden ejercer sentencia sobre un club, ahora sí, por corrupción deportiva. Lo que sería incluso peor para el F.C Barcelona a nivel de institución.
Expertos en la materia hablan de la necesidad de tiempo para determinar un caso tan extenso cómo es, desgraciadamente, este. Sin embargo, parece ser que para diciembre o enero podremos ver a expresidentes de la entidad blaugrana prestando declaración en un banquillo. Tampoco olvidemos que hay una cita concertada con Enriquez Negreira para que un medico forense determine sí ese repentino alzehimer avanzado es tan inhabilitante cómo alegaron en su momento. Muchos temas a tratar que seguiremos con paciencia pero con rigor.
Mientras tanto, queda esperar y escuchar qué tienen que decir actores implicados como Medina Cantalejo, El Ministerio de Cultura y Deporte, el CSD… etcétera y un largo etcétera. Probablemente Medina Cantalejo deba dimitir ya que el juez lo ha expulsado del caso por su clara relación con los árbitros y porque, quizás en un mal día, amenazó a un árbitro de VAR que denunció llamándole «rata». Trincheras de Federación.
Imagen vía: Getty Images
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El tiempo dirá que pasa con esta gente…