85 a 125 fue el humillante marcador que sufrieron los Golden State Warriors en el Chase Center ante los vigente campeones. Solo Stephen Curry firmó dobles dígitos en anotación del quinteto titular; abriendo de nuevo las puertas a un cambio de aire del base o del futuro del equipo californiano.
“Hay que tirar todo esto por el retrete”. Esas fueron las palabras de un técnico que está viendo cómo el sistema de juego que les hizo convertirse en una de las mayores dinastías de la NBA, ahora está cavando su propia tumba.
Los Golden State Warriors se han convertido en un equipo mediocre, sin aspiraciones al título ni a luchar por nada más allá de los puestos Play-In. Stephen Curry está viendo como sus últimos años en la franquicia de su vida, están ensuciando la historia que ha escrito allí. No hay nada más doloroso que ver como lo que has creado con tu esfuerzo y sacrificio, se desmorona sin tú poder hacer nada.
Steve Kerr, técnico de los Warriors, sigue empeñado en el juego small-ball, abusando de los tiros de tres, pero la plantilla actual no es acorde con ese esquema. Actualmente, los californianos son el tercer equipo que más triples intenta por encuentro (41,6), pero ocupan la 14ª posición en porcentaje en estos tiros (36,2%).
¿El fin del small-ball?
Está claro que, si desde las oficinas de los Warriors no se valora un cambio de técnico, la única solución para reconducir esta situación es buscar en el mercado de traspasos.
El nombre que más ha sonado en las últimas semanas para recaer en los Warriors es Jimmy Butler. El jugador de los Heat aportaría defensa exterior e interior, pero no encaja en el esquema ofensivo, es por eso que se han disipado los rumores en los últimos días.
Ahora el nombre que más resuena es Nikola Vucevic. El pivot de los Chicago Bulls sería un buen movimiento para los de la bahía. Un jugador que genera mucha atención en la zona, con capacidad de descargar para generar tiros exteriores liberados, y que juega con fluidez los bloqueos indirectos característicos de los Warriors.
El pensamiento más puesto en el futuro
En varias ruedas de prensa, Kerr, Curry y Green han comentado que no quieren hacer un traspaso «desesperado» que pueda hipotecar el futuro de la franquicia en un futuro.
La realidad en este momento es que los años de éxitos y gloria de los Golden State Warriors están llegando a su final (si no ha llegado ya). Un técnico obcecado a una pizarra de juego incompatible con su plantilla, pero que nunca hay que tomar por loco.
En 2022, nadie contaba con los Warriors para luchar por el anillo, y lo ganaron. No sería la primera vez que un equipo con una mala temporada regular, se planta en las rondas finales de los playoffs, y seguro que, pese a que no quieran poner en peligro el futuro de la franquicia, los de California harán algún movimiento que les vuelva a dar prestigio.
Imagen principal vía: Photo by Tim Warner/Getty Images
Por: Sergio Martín Gómez; podéis seguirme en X @best_7yea y en Instagram @srgiiomg_8
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