AnálisisBaloncestoPrimera FEB

Este Estudiantes huele a ACB

El Movistar Estudiantes mantiene el invicto en su primer partido como local tras vencer al Inveready Guipuzkoa por 93 a 88.

Victoria del Movistar Estudiantes en su primer partido en casa por 93 a 88 ante un Guipuzkoa Basket que suma dos derrotas en dos partidos. Nacho Varela y Tanner McGrew lideraron a cada equipo en anotación. 

Quintetos iniciales

Movistar Estudiantes: Granger, Giovannetti, Salin, McGrew, Nwogbo

Inveready Guipuzkoa: Varela, Motos, Nicolau, Korsantia, McGhie

Un ataque digno de primera (54-37)

Vendaval ofensivo del ‘Estu’ (31-10)

Inicio fulgurante del Movistar Estudiantes para comenzar la temporada como local. 14-2 de parcial para los azulones, liderados por un Sasu Salin que quiere poner patas arriba la Primera FEB. En la primera jornada, el finés terminó con 26 puntos con 5 triples, y en los primeros 5 minutos del encuentro frente a Guipuzkoa, sumaba 5 puntos con 1 rebote y 1 asistencia. Sin haber llegado a la mitad del cuarto, todos los titulares del ‘Estu’ habían anotado.

El Guipuzkoa por su parte se obcecaron con los triples pese a tener un porcentaje ínfimo (0/6). Además, sufrieron mucho en ataque cometiendo varios bloqueos en movimiento.

La experiencia y visión de juego de Salin y, principalmente de Granger, aportan al Estudiantes un dinamismo tremendo tanto en transiciones como en juego estático. Con bloqueos directos e indirectos por toda la cancha, se generan muchos espacios.

Sobre la bocina, Silverio anotaría un triple espectacular, consiguiendo un hecho histórico. Los 10 jugadores del Estudiantes que tuvieron minutos en el primer cuarto anotaron.

Intento de remontada vasca (23-27)

El cambio de cuarto no significaría un cambio de tendencia. Aunque el Estudiantes bajó un poco los brazos en defensa (12 puntos recibidos en 4 minutos), en ataque el abanico de opciones tanto de titulares como de suplentes no se redujo (14 puntos en el mismo tiempo). Tanner McGrew iba levitando por la cancha. Un falso mano a mano que terminaría en 2+1 levantó a un Movistar Arena que estaba disfrutando del nuevo equipo de Toni Ten.

A falta de 3:02 del segundo cuarto, entraría a la pista Goran Filipovic. Tras su espeluznante lesión en Béjar en el amistoso ante el Fuenlabrada, se esperaba que el croata estuviera mucho tiempo apartado del equipo, pero en la jornada 2 ya ha podido reaparecer.

El Guipuzkoa se puso las pilas comandados por el ex Estudiantes, Varela, para recortar la ventaja de los 26 puntos que llegaron a estar abajo a tan solo 16. Parcial de 10 puntos que hizo pedir hasta dos tiempos muertos a Ten.

Tras otro triple de Nacho Varela y una buena acción del Estudiantes para cerrar la primera mitad, los jugadores se irían a los vestuarios con el marcador con 54-37. Varela con 11 puntos para los visitantes y McGrew con 9 para los locales, eran los líderes en anotación.

A punto de la catástrofe (39-51)

Echarse la siesta tiene consecuencias (19-29)

Los visitantes salieron con más actitud en la segunda mitad. Corriendo mucho más al contraataque, el conjunto vasco hizo mucho daño en transiciones rápidas por medio de Varela y Hanzlik. Varela tenía la muñeca «calentita», anotando su séptimo triple a falta de medio tercer cuarto.

La siesta «estudiantil» llegó a ser preocupante. Con errores no forzados y muy infantiles, permitieron a los visitantes a ponerse tan solo 4 puntos abajo. Toni Ten tenía que despertar a sus jugadores si no quería perder un partido que llegó a ir ganando por 26 puntos. La razón principal de esta remontada estaba siendo un Varela inspiradísimo (23 puntos en 18 minutos).

Asier González (11 puntos) apareció con dos buenos cortes por el carril central para volver a distanciar a los suyos. El rebote defensivo estaba causando estragos al Estudiantes, permitiendo 9 capturas ofensivas del conjunto vasco y muchos puntos de segundas oportunidades. Con el 73-66, el partido entraría en el último periodo.

Morir en la orilla (20-22)

El Guipuzkoa Basket quería culminar la remontada, pero Vaulet no se lo iba a poner fácil. El argentino empezó a coger ritmo colocándose como máximo anotador de su equipo (12 puntos).

En defensa el Estudiantes no solucionaba el problema del rebote. 12 rebotes ofensivos de los de San Sebastián para seguir cerca en el marcador. El vendaval ofensivo del primer cuarto se quedó en un espejismo el resto del partido, pero la ventaja fue clave para no verse por debajo en el marcador.

Giovannetti anotó un triple que colocó el +8 en el marcador, pero el ‘Estu’ seguía sufriendo en zona. El acierto inicial desde la larga distancia del equipo madrileño se vio minimizada al final del partido (9/26). Ansorregi estaba siendo crucial en la remontada vasca (18 puntos), aprovechando numerosas segundas oportunidades.

A falta de menos de un minuto, los árbitros marcaron un final de la posesión de Guipuzkoa algo polémica, ya que coincidía con una falta del ‘Estu’.

Granger tomó las riendas del equipo para salvar los muebles. Todo quedó en un susto, pero debe de servirles como toque de atención.

Con el 93-88 final, el Estudiantes certificaba su segunda victoria mientras que el Guipuzkoa veía esfumarse su gran intento de remontada. Varela con 23 puntos fue el máximo anotador del partido.

Imagen principal vía: Movistar Estudiantes

Por: Sergio Martín Gómez; podéis seguirme en X @best_7yea y en Instagram @srgiiomg_8

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