Óliver Torres se ha destapado como un jugador comprometido y que entiende la filosofía sevillista, lo ha demostrado tirando del equipo en los últimos partidos
Para llevar a cabo el objetivo que se ha marcado en Nervión, competir hasta el final por todo, se necesita una amplia nómina de futbolistas válidos y comprometidos. Julen Lopetegui tiene, por así decirlo, a su equipo de gala bien elegido, pero también sabe que esos 11 no pueden jugarlo todo. Es aquí donde cobra importancia la llamada ‘unidad B’. Esa lista de jugadores que no tienen la vitola de titular pero que a lo largo de la temporada son iguales de importantes que los que suelen saltar al campo desde el pitido inicial. Podríamos hablar de Munir, Escudero, Sergi Gómez, Gudelj, De Jong u Óscar Rodríguez. Pero el jugador ‘número 12’ por excelencia del técnico vasco es Óliver Torres.
Es ya sabido que el extremeño es muy del gusto de Lopetegui, que lo tuvo en Porto y en las categorías inferiores de la selección española, de ahí la persistencia de Monchi en hacerse con él hace año y medio. Su posición, la del interior, siempre ha estado muy bien cubierta: Jordán ha sido clave desde su llegada y a Banega lo ha sustituido Rakitic. Aún así, el ex del Atlético de Madrid disputó 1.604 minutos en liga el curso pasado.
Clara mejoría
Esta temporada, su rol empezó siendo el mismo; ha jugado el 47% de los minutos, pero en las últimas jornadas ha dejado claro que quiere más y que está por la labor. Siempre que tiene una oportunidad, la pide, la quiere, siente que tiene que ser quién conecte con la delantera. Tiene personalidad y nunca se le ve bajo de confianza. No se esconde a la hora de arriesgar un pase o un regate, al igual que nunca baja la cabeza a la hora de correr hacia atrás. En el partido ante el Borussia Dortmund hizo lo propio. Agarró el balón y agilizó el juego, llevándolo lo más rápido posible al área rival.
Lopetegui le usa mucho ante sistemas defensivos de bloque bajo. Es el jugador de la plantilla que mejor rompe las líneas de pase rivales y más velocidad le da al juego, algo valioso ante estos tipos de contrincantes. Ya fue clave ante el Huesca, llegando a línea de fondo y poniendo de gol a Munir.
Una plantilla que aspira a grandes cosas debe tener este tipo de jugadores. Hombres capaces de sustituir a los titulares y no desentonar cuando son uno de ellos. Óliver se ha adaptado al 100% y es una persona importante en el vestuario. La llegada del ‘Papu’ Gómez también ha sido clave para ponerle las pilas a los demás mediocentros, que están dando su mejor nivel en una parte fundamental de la temporada..
Imagen principal vía: Sevilla FC.
Sígueme en @IvanOropesa7 y sigue toda la información y actualidad del mundo del fútbol en @Vip_Deportivo, en nuestro Facebook: VIP Deportivo e Instagram: @vp_deportivo.
