Los peñistas del Espanyol califican de inmorales e injustas las decisiones tomadas durante el Estado de Alarma y aseguran que sin afición no hay fútbol.
La «Federació Catalana de Penyes del RCD Espanyol de Barcelona» hizo público un comunicado en el que se dirigía a las «diferentes instituciones que gobiernan el fútbol en el Estado Español» y les acusaba de haber actuado de manera adultera, poniendo énfasis en los intereses económicos y obviando la primacía de la salud pública.
Son diferentes los puntos que albergan en dicho escrito. En primer lugar, consideran inmorales las distintas polémicas surgidas por la pelea sobre la reanudación del campeonato entre LaLiga y la Federación. Además, velan por el «valor de la humanidad por delante de los beneficios económicos». Con ello, proclaman su defensa de mantener parada la competición liguera hasta que la salud del país no alcance terrenos de estabilidad y se halle fuera de peligro.
Critican, también, el planteamiento de reanudar la competición liguera sin contar con la presencia de público. Esto supone «vulnerar el derecho de las aficiones». Califican de injusto el hecho de que el mismo partido en la ida se disputase con público y en la vuelta no. Esto supone «jugar con un jugador menos» para el equipo local. En este sentido, lamentan que la AFEPE (Aficiones Unidas) se mostrase aceptase los partidos a puerta cerrada.
Reanudar la competición, abogan, supone «poner en riesgo la salud de los futbolistas, de todas las personas que intervienen y de todas sus familias». Hacen referencia, también, a la polémica de moda en el entorno futbolístico sobre los test masivos. Se muestran indignados, ya que «se trata de una herramienta escasa e imprescindible para sanitarios y enfermos cuando, todavía muchos de ellos, no tienen acceso«.
Antes de poner el punto y final al comunicado, hacen hincapié en el valor de los aficionados y en su trascendencia en el mundo del fútbol. Alegan que «el fútbol existe porque hay una afición que, como su sentimiento, vive el día a día del fútbol y asiste a los partidos». Además, aseguran también que «decisiones y actitudes como las de las últimas semanas, cargadas de egoísmo y mercantilismo, alejan a los aficionados de este fútbol».
La situación de los pericos en liga es algo compleja, dada su posición en la tabla y los partidos restantes adquieren una trascendencia abismal y la necesidad de una afición entregada. Es por ello que las peñas del Espanyol buscan un cambio de rumbo en la actitud de las instituciones españolas de fútbol. Confían en que el deporte rey vuelva cuanto antes posibles, pero con la disponibilidad de todas sus ámbitos. Entre ellos, el más importante, la afición. Porque «no hay fútbol sin aficionados».
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