La expansión mundial del fútbol I: Europa

El fútbol llegó por todo el viejo continente a finales del siglo XIX gracias a los trabajadores británicos.

El fútbol en Gran Bretaña ya estaba avanzado y con el profesionalismo en pleno auge. Inglaterra, Escocia, Irlanda y Gales contaban con equipos y competiciones que hacían crecer el deporte masificándolo. Solo hacía falta que lo enseñaran al resto del mundo. Como si de unos profetas se trataran, fueron por cada rincón del planeta con un balón, permitiendo esta expansión.

Francia

Francia vio como los gustos de su gente fueron evolucionando a la par que las ideas del país. Después de duras épocas marcadas por los gobiernos napoleónicos, Francia menguó las ganas de hacer la guerra. Comenzó a centrarse en el entretenimiento buscando nuevos intereses como el rugby o el ciclismo, deportes estrella en el país.

Allí el fútbol no tenía tanto tirón, después de que los británicos lo introdujeran en el país galo, tuvieron que pasar años hasta que fueran los propios franceses quienes jugaran y no lo vieran como un deporte ridículo. Seguramente para los sofisticados franceses ver a un puñado de británicos con medias y pantalones cortos pateando un balón no era lo más glamuroso posible.

El primer club fundado en Francia fue el Le Avre Athletic Club, creado en 1872 por y para británicos. Quizá esta exclusividad fue lo que generó el rechazo de los habitantes franceses. Bien es cierto, que los británicos fueron unos auténticos colonizadores al más estilo Napoleón. Llevaron el fútbol por todo el país, empezando por la región del canal de la Mancha y terminando por la capital parisina. Allí organizaron el primer campeonato de Francia organizado por la USFSA, asociación principal antes de la FIFA.

Antes de su creación y de que fuera presidente, Jules Rimet ya comenzaba a sonar en el fútbol fundando la Red Star de París, quienes adoptaron la filosofía profesional de pagar a sus jugadores. También a final del siglo en 1899 se fundó el Olympique de Marsella, basado en el Football club de Marsella y el club de esgrima L’Éppe.

Centroeuropa

Centroeuropa representaba una enorme parte de la potencia del viejo continente a todos los efectos y el fútbol no iba a ser menos. Países como Holanda, Dinamarca o Bélgica llevaban la delantera y ya estaban depurando su fútbol importado por los británicos que visitaban estos bonitos territorios.

En 1889 se crearon las federaciones holandesa y danesa, un año antes en 1888 se había fundado el Sparta de Rotterdam en Países Bajos mientras que los daneses llevaban desde 1880 viendo jugar al Aarhus GF. Bélgica unos años más tarde también creó su federación en 1895 aunque más antiguo era el K. A. A. Gent fundado en 1864 como club de gimnasia y cuyo emblema homenajea la visita de Búfalo Bill y sus indios al circo de Gante en 1895.

Austria, Checoslovaquia, Hungría, Alemania y Suiza fueron los siguientes. En la capital de Austria apareció el Rapid de Viena en 1898 como club de trabajadores vieneses, y en 1899 se adaptaron al fútbol y a sus tradicionales colores verdiblancos. Mismo camino tomó el Ujpest en Hungría, comenzando como club de gimnasia en 1888 y pasándose al fútbol en 1899 bajo sus colores morados y blancos. En Checoslovaquia el Slavia de Praga hizo su aparición en 1892, mientras que en Suiza nació en 1879 el FC St. Gallen.

Alemania estaba un paso atrás respecto al resto de países mencionados, su primer equipo fue el conocido Múnich 1860. A este le siguieron otros como el Hertha de Berlín en 1892 llamando al club como el barco a vapor del dueño. En 1900 llegó el gigante de Baviera, el Bayern de Múnich, surgido del antiguo MTV Múnich. Si bien es cierto que los inicios del Bayern y Alemania en el fútbol no fueron muy brillantes y tuvieron que crecer poco a poco.

Italia

Italia que vivió el Calcio florentino durante siglos no tardó en apasionarse por el fútbol. Un país tan arraigado a la patria se dejó engatusar por ese deporte que practicaban los ingleses y que se hermanaron a ellos fundando los grandes clubes del país.

Es así como se funda el Genoa Cricket and Athletic Club en 1893, club de fútbol más antiguo de Italia. Uno de los creadores del club fue James Spensley, y es que la figura de este doctor inglés fue clave en el desarrollo y difusión, siendo considerado uno de los padres del fútbol italiano llegando desde un barco a Génova en 1896 para curar marineros ingleses.

Él mismo fue el encargado de introducir el fútbol al Genoa en 1897 pasando a ser jugador y entrenador, no satisfecho con eso también organizó el primer partido de fútbol italiano entre el Genoa y un combinado de Turín. Con el transcurso de ese año llegó la fundación de la federación italiana de fútbol en 1898 y la liga, ganada por el Genoa. Durante esos años también se crearon los principales equipos italianos, en 1899 nació el Milan Cricket and Football Club formado por ingleses adinerados.

En Turín vio la luz el Sport Club Juventus, fundado por estudiantes italianos que adoptaron al club el inicial traje rosa con corbata negra. También de dicha ciudad salió la Società Ginnastica Pro Vercelli en 1892. El fútbol en Italia se convierte en una fiebre, los aficionados alientan en el campo como si del coliseo se tratara y comienzan a utilizar conceptos como referee o back.

España

Para encontrar los primeros indicios de fútbol en España debemos trasladarnos hasta Huelva, más concretamente a las Minas de Riotinto. Allí los ingenieros y mineros ingleses jugaban al fútbol en sus ratos libres durante la década de 1870. Al igual que en muchos países, el fútbol también fue introducido en las escuelas privadas que fomentaban la práctica del deporte. Paralelamente, los ingleses fueron llegando a otros puertos como los de Vigo, Bilbao o Barcelona expandiendo el fútbol por toda la península.

En 1873 se fundó en Vigo el Exiles Cable Club, sociedad creada por los trabajadores en el telégrafo y cableado inglés. Por otra parte, en Madrid se crearía el Cricket y Foot-Ball Club a finales de 1879, el cual fue el primer club legalmente establecido. Diez años después aparecería el decano del fútbol español, el Real Club Recreativo de Huelva, que fue una sucesión al proto club creado años antes, bajo el nombre de Río Tinto English Club.

En 1889 Charles Adam y Alexander Mackay decidieron crear una sociedad con la finalidad de jugar al fútbol entre la comunidad inglesa de Huelva y sus propios habitantes. Fue así el 23 de diciembre que se firmó en el Hotel Colón la fundación oficial del Recreativo, nombre surgido por la intención de hacer un «club de recreo». En sus inicios organizaban encuentros entre tripulantes de barcos ingleses y los mismos integrantes del club.

Al poco tiempo recibieron la solicitud de un club recién fundado en Andalucía, el Sevilla Football Club, creado en 1890. Recreativo y Sevilla se enfrentaron en lo que sería el primer partido oficial en la historia de España. El Sevilla se llevaría el duelo por 2-0. Otro antiguo club nacería en la mancha bajo el nombre de Albacete Balón-Pie, antecesor al Albacete formado por trabajadores de locomotoras Mikado y relacionado con la empresa Talgo.

A partir de aquí, comenzó la aparición masiva de clubes españoles. Nació en 1889 el Football Club Barcelona de la mano del suizo Joan Gamper. En 1903 lo hizo el Athletic de Bilbao, fusionándose con el Athletic Club y el Bilbao FC, mismo año en que crearon una sucursal en Madrid bajo el nombre de Athletic de Madrid; años más tarde nombrado Atlético de Madrid. En la misma capital es donde también nació el Madrid Football Club en 1902, impulsado por los hermanos Padrós continuando la sociedad de Foot-Ball creada en 1897. El viejo continente ya tenía su pasatiempo favorito.

Imagen principal vía: Getty Images

Por: Kevin Chin Galindo

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