El técnico del FC Cartagena visitará El Plantío, pero tendrá que conformarse con ver el partido desde la grada.
Sentimientos a flor de piel
El próximo desafío de liga para el FC Cartagena tendrá un significado único para Julián Calero. El entrenador de Parla regresa a Burgos para enfrentarse a su ex equipo, al que estuvo al mando durante las tres temporadas anteriores.
El técnico albinegro no podrá dirigir a sus jugadores desde la banda, ya que debe cumplir su segundo partido de sanción. Calero admitió que la situación es molesta, pero la acepta con fair play.
Un equipo muy bien armado
El técnico de Madrid advirtió que los registros del Burgos como local no asustan al equipo visitante albinegro: «Aquí no hay equipo invencible». Calero señaló que en la actualidad «cualquier equipo puede vencer a cualquier otro» en la segunda división, y que su equipo ha corregido los errores cometidos contra el Elche para desafiar la racha invicta de los burgaleses en su estadio. «Vamos a Burgos con gran entusiasmo y determinación para obtener un resultado positivo», anticipó.
Las estadísticas no dejan rival, ya que el Burgos CF lleva 0 derrotas en los últimos 14 partidos en su feudo, por lo que la tarea del FC Cartagena será muy complicada.
Llueven los elogios
El FC Cartagena recupera efectivos
Todo apunta a que veremos en El Plantío la vuelta de tres componentes de la columna vertebral del Efesé como son Jairo, Damián Musto y Tomás Alarcón, este último forzará para poder estar, dada su luxación hace dos partidos.
Iván Calero estaba en duda pero ha entrenado con el grupo, por lo que la única incógnita en el horizonte será el arquero Lizoain por problemas físicos, lo que hace pensar que se podría ver el debut de Mejías en la portería albinegra.
Gonzalo Verdú cumplirá con sanción por acumulación de amarillas.
Imagen vía: FC Cartagena.
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