El Atlético de Madrid venció por 2-0 a la Juventus en la ida de los octavos de final de la Champions League.
El Wanda Metropolitano ha vivido ayer su primera noche memorable, de esas noches históricas que sirven como respuesta para la pregunta: ¿porqué somos del Atleti? El espíritu del Vicente Calderón se traslado al joven estadio colchonero, y el jugador número 12 empujo hasta el final a los guerreros del ‘Cholo’ Simeone. Esos soldados que, a pesar de que todo el mundo daba a la Juventus como muy favorita, desde el primer segundo salieron a comerse a la campeona de Italia. Y finalmente, con coraje y corazón, el Atlético de Madrid se sobrepuso a uno de los mejores equipos de Europa, a Cristiano y hasta al VAR.
Y el partido lo comenzó ganando Simeone con su espectacular planteamiento. De principio a fin, dando una lección a Allegri y empequeñeciendo a toda una Juventus. Salió con el famoso ‘cuatrivote’ formado por cuatro centrocampistas puros como lo son Rodri, Thomas, Koke y Saúl, y su trabajo defensivo fue inconmensurable, provocando constantemente superioridades defensivas con 3 contra 2 y 2 contra 1. Entre el minuto 60 y el 65, Simeone demostró porque es el mejor entrenador del mundo. Diego Costa y Koke, que llegaron renqueantes al encuentro, lo dieron todo durante una hora, y dejaron su puesto a Morata, Lemar y Correa, que completaron el trabajo de los internacionales españoles al aportar frescura y vigor físico. Tres cambios valientes que le cambiaron la cara al equipo, y que desencadenaron en los apoteósicos últimos 20 minutos.
Simplemente el Atlético de Madrid le dio un baño a la Juventus de Cristiano Ronaldo, ese jugador que no apareció como esperaban muchos. Y de ello tienen mucha culpa la mejor pareja de centrales del mundo. Godín y Giménez estuvieron imperiales, siendo contundentes en ambas áreas, pues fueron los dos goleadores del choque. ¿Volvió el Atlético Aviación? El meneo fue tal, que el partido pudo acabar 5-0 si Diego Costa no hubiera fallado un mano a mano, si la vaselina de Griezmann no hubiera tocado el larguero y si el arbitro fuera mas inteligente para no anular el gol de Morata. Faltan los 90 minutos del partido de vuelta, pero los chicos de Simeone han adelantado una buena parte del trabajo. Pero sobre todo, este partido quedara en los anales de la historia del club y del Wanda Metropolitano, pues por eso el hincha colchonero se fue a su casa cantando ¡Este es mi Atleti!
Imagen destacada vía: Trome
Escrito por: Francisco Rodríguez
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