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El Real Madrid Femenino se come al Betis

El Real Madrid Femenino vuelve a ser una apisonadora. Las de Toril daban esta mañana una lección de buen fútbol y, por supuesto, de la calidad individual de las jugadoras.

Las merengues volvieron a demostrar que son un equipo más consolidado. Lo cierto es que, el Real Madrid Femenino se vio en apuros ante el Betis Femenino, especialmente en los primeros 20 minutos. De nuevo, Athenea del Castillo volvía a brillar, y la afición se rendía a sus pies.

La cántabra fue la gran protagonista del encuentro. En todas las ocasiones de gol de las merengues, Athenea estaba presente.

Además, Alberto Toril sorprendía con su XI inicial al sentar a Maite Oroz. Por lo que la sala de máquinas quedaba, sobre todo, a los pies de Zornoza y Kaci.

45 minutos muy duros

Que iba a ser un encuentro muy duro era algo conocido en la Ciudad Real Madrid, pero las de Toril se mantuvieron en su línea.

Las blancas mostraron una impresionante calidad técnica en la primera mitad. Los pases de Athenea o los taconazos de Esther levantaron a la afición madridista. Lo que quizás no se esperaban era la presión e intensidad de las béticas, que fueron las primeras en ver la tarjeta amarilla por sus intensas acciones.

Las delanteras vikingas intentaron todo tipo de jugadas para adelantarse en el marcador, lo que hacía que las béticas tampoco generasen grandes peligros en el área de Misa Rodríguez. La arquera, una vez más, se echaba al equipo a las espaldas y guiaba a sus compañeras desde los palos.

La defensa local se colocaba con rapidez, y las actuaciones de Kenti e Ivana hacían que el esférico no llegase a los palos. Por otro lado, el peligro para Misa estaba en las jugadas aéreas, en las que las visitantes tenían más facilidad de remate.

Asimismo, las blancas se desesperaban ante las numerosas ocasiones que dejaron escapar en unos duros 45 minutos en los que fueron claramente superiores.

Constancia y perseverancia

Las de Amorós volvían a asaltar el césped del Di Stéfano con mucha presión. Olga Carmona se desesperaba ante las jugadas que se quedaban en nada, bien por fuera de juego o bien por impedimento de la defensa bética.

Quien más sufrió la intensidad de las andaluzas fue Kosovare Asllani. La sueca estaba siendo acribillada por las visitantes, y es que la mayor parte de las tarjetas que vieron las béticas fue por infracciones sobre la delantera.

Tras mucho sufrimiento, la constancia en ataque tuvo su recompensa. Al contragolpe, y en el minuto 68, Esther estrenaba el marcador, adelantando así a las locales.

El enfrentamiento tampoco estuvo exento de las polémicas arbitrales a las que ya nos tiene acostumbrados la Liga Iberdrola. Un posible penalti sobre Athenea, junto con la infinidad de faltas no señaladas, enfurecían a las gradas.

El esfuerzo de las merengues se vio hasta el final. Una vez más, queda demostrado que Toril ha despertado al equipo que un día se durmió con David Aznar.

Imagen principal vía: Real Madrid Femenino

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