Después de unos años gloriosos en Europa, el Madrid cae en octavos frente al Ajax.
Todos sabemos la historia del Titanic. Un transatlántico, el más famoso de la historia, que se hundió tras chocar contra un iceberg. Los últimos cinco años del Real Madrid son idénticos. Un equipo que gana cuatro Champions, tres de ellas seguidas. Nadie había revalidado el título desde el Milan (88/89,89/90). Nadie lo había ganado tres veces consecutivas desde el Bayern del 74 hasta el 76, o el Ajax de Cruyff desde el 71 hasta el 73. Un dominio blanco en Europa en el que se vislumbraba un final como el de ayer. Como el Titanic y el iceberg.
Muchos apuntan a los jugadores como culpables, otros al entrenador y otros a la planificación deportiva. Cuando realmente tienen responsabilidad las tres partes y lo que tocaría debatir es el porcentaje de cada uno. Porque es innegable que hay muchos jugadores fuera de forma o que no han dado el «paso adelante» esperado tras la venta de Cristiano Ronaldo. Tampoco es menos cierto que la marcha de Zidane seguramente se dio porque pudo presagiar que pasaría algo parecido a lo de anoche ante el Ajax o que si se marcha tu mayor estrella te debes reforzar mejor. Pero sobretodo toca recordar la manera en la que el Real Madrid ha ganado sus últimas Champions. En todas estas ediciones, el Madrid tuvo momentos de épica, remontadas y esa pizca de suerte que se necesita en Europa y que por cierto ayer se pudo repetir con ocasiones manifiestas de gol por parte de los de Solari. Y si vamos a la regularidad, en liga, ya estaban más que advertidos. Un equipo que al final lo dejaba todo a una carta.
Ahora les tocará dar la talla en LaLiga y hacer una profunda reflexión desde el club de las necesidades, virtudes y carencias que tiene su plantilla. Seguro que será un verano movido en el club blanco.
Imagen principal: EL TIEMPO
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