Tras perder siete finales consecutivas, el pasado sábado Jürgen Klopp ganó con el Liverpool la final de la Champions League.
Como el fútbol está montado para los que ganan, estos últimos días todos hablan maravillas de Jürgen Klopp. Pero, 24 horas antes de afrontar su octava final, y la segunda consecutiva de Champions League con el Liverpool, y habiendo perdido todas ellas, el técnico alemán era considerado por estas personas que hoy le elogian como un «perdedor». Llego, llego, llego, llego, llego, llego y llego, pero perdió, perdió, perdió, perdió, perdió, perdió y perdió. Y nadie valoraba el cómo llegaba a esas finales, y si criticaban el porque las perdía. Klopp se dedico a aprender de la derrota, que es la cara de la moneda que mas nos toca en el fútbol y en la vida, para luego volver y ganar.
Tres finales después, Jürgen Klopp por fin tiene su Champions. En Madrid recibió el premio del resultado, que no es otro que ganar. Pero, el premio de hacer a sus equipos unos super equipazos lo empezó hace muchos años. La carrera del técnico alemán siempre ha ido de la mano de clubes con más déficits que virtudes deportivas. Empezó en la Segunda División alemana con el Mainz 05, al que llevo de la mitad de tabla de la categoría de plata del fútbol germano, a clasificarse a la Europa League. Después, devolvió al Borussia Dortmund al mapa de elite del futbol europeo, ganando dos Bundesligas y llegando a una final de Champions ante el Bayern de Múnich, ese equipo con un gigantesco poder económico y deportivo que se llevo a los futbolistas que Jürgen había convertido de buenos jugadores a super estrellas del fútbol mundial (Lewandowski, Gotze…).
Precisamente el potenciar a cada jugador para formar un colectivo ganador, es lo que convierte a Jürgen Klopp en uno de los mejores entrenadores del mundo. Lo ocurrido el sábado no fue un homenaje a la final, sino a un hombre, una idea y un equipo. El alemán fabrica equipos de autor, de esos que reconoces en el césped del Metropolitano o en el campo de barro de tu pueblo. Eléctrico, presión, carrera y remate, replegar y salir, juntarse, morir. Puro Rock and Roll. Para los que nos gusta analizar el «cómo» se realiza el camino para ganar, llevamos tiempo disfrutando de Jürgen Klopp. Esta Champions la empezó a ganar justo después de perder la última ante el Real Madrid, cuando, de madrugada, arengo a su afición con un video cantando. A su manera, carismático como pocos, Klopp aprendió de la derrota para hoy llegar a la victoria.
Imagen destacada vía: CDF
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